Raíces

Escultura aérea, Octubre 2014. Palo de playa e hilo de algodón negro. 2,60mts X 0,90mts.

 

Pep me pidió alegrar este espacio vacío. Al estar hace poco tiempo en la casa, se me ocurrió hacer esta pieza, que para mi simboliza enraizamiento y adaptación. Los dos disfrutamos del proyecto. Cuando acabamos, me di cuenta de que entre los muchos palos que tengo en el taller, inconscientemente había utilizado uno que habíamos encontrado juntos hacía poco en Port de la Selva, un pueblito en el que Pep hace tiempo que tiene raíces.

 
Anterior
Anterior

Otoño en casa

Siguiente
Siguiente

Apartamento en Barcelona